sábado, 5 de diciembre de 2009

S. Esteban, un destino prometedor

Ya os he mencionado en alguna ocasión este puerto, perteneciente a Muros de Nalón. No es propiamente un puerto pesquero, aunque actualmente cuenta con una importante flota amarrada, pues desde aquí salen los pescadores de Cudillero, Muros y alrededores a la angula y ésta es la época de más afluencia.
Además, hay un buen número de embarcaciones de recreo, de gente que tiene aquí su primera o segunda vivienda y de otros que ni viven, pero tienen aquí su amarre.



Antiguamente, primeros del XX, fue un importante (el segundo, tras Gijón) puerto industrial. En ferrocarril traían el carbón desde las Cuencas mineras para exportarlo rumbo a diferentes destinos. La vida entonces era dura, pero el pueblo era próspero y generador de muchos puestos de trabajo. Al desaparecer esta actividad, el pueblo se fue quedando muerto, con sus casas mortecinas y las aguas teñidas de negro, todo era gris, cuando no negro como el carbón.
Años pasaron hasta que vuelve a revivir; un grupo de activistas, otros grupos de intelectuales, algún loco inversor y el boom inmobiliario hacen que S. Esteban resurja de sus cenizas. El Ayuntamiento mira para el pueblo: facilita el lavado de cara de sus edificios históricos, permite la edificación de muchos nuevos, con cierto orden y gusto (salvo alguno, que en el centro mismo, constituye un auténtico pegote, pero siempre tiene que haber una excepción, no). Y diferentes actuaciones van mejorando poco a poco el lugar: piscinas de agua salada, dragado del río, senda costera, paseo temático, iluminación del puerto y de la subida al Espíritu Sto., y la reciente rehabilitación de la antigua iglesia para destinarla a auditorio. Y la inversión privada que apuesta por este destino, ahora más turístico que otra cosa. Hay varias tiendas de las de toda la vida, un comercio más grande de alimentación, autoservicio, con carnicería y platos precocinados buenísimos, que abre incluso los domingos por la mañana. Una tienda de regalos y de mucho más, Reinal, que además de tener cosas que están muy bien de precio y calidad, te facilita el pago con cupones (algo que me resulta curiosísimo, y a la gente le gusta). Una tienda de antigüedades, 2 bares de siempre, que conservan la decoración de aquella época más próspera. Y 4 sidrerías, restaurantes, tascas (llámense como quieran), contando el de la barra, en los que se come muy bien, a un precio asequible y donde el trato es muy bueno. Y recientemente ha vuelto a abrir sus puertas un restaurante maravilloso, por su decoración y su enclave, que ya tiene algo más de nivel. Lo han cogido unas hosteleras de Cudillero, con una trayectoria conocida en la zona y lo están haciendo muy bien, a su manera, y con un éxito importante, dados los tiempos que corren.
Si tengo que recomendaros alguno os diría que cualquiera, dependiendo de lo que queráis: unas tapas en un lugar con sabor antiguo, el Antiguo Molinillo; si preferís lo mismo con una decoración marinera más cuidada, la tasca El Puerto; si buscáis parrilla tiene que ser Puerto Chico, con espectáculo musical en vivo la noche de los sábados. Para unos platos algo diferentes el Entre amigos. Si quieres algo distinguido (pero sin tener que dejar la chequera en el empeño) con una buena cocina, Puerto Norte.
Y por supuesto, antes de comer o de cenar, hay que hacer la ruta por todos (:-)) tomando unos vinos o unas sidrinas. Y después de cenar, a la Cantinatxa a tomar unas copas y a ver con qué espectáculo nos sorprende uno de los más avispados emprendedores de la zona.

Lo que sí os recomiendo es un paseo hasta la desembocadura, la barra, para ayudar a bajar todo lo que os hayáis metido con gusto al cuerpo.
Se me olvidaba mencionar que también hay un despacho de prensa, un albergue, telecentro, biblioteca y una farmacia muy completa. Sigue contando con parada de Alsa (autobuses) y estación de FEVE (trenes). Y un club náutico, que está intentando promover esta actividad como recurso turístico para la zona.
Sólo nos falta una pasarela peatonal (que está proyectada) para unir las dos orillas del Nalón y así gozar también de la maravillosa playa de los Quebrantos.
Qué más se puede pedir!! Tenéis que venir a conocer S.Esteban y os aseguro que os gustará, tiene un algo (aire decadente, elegante, no sé…) que atrae, y a su gente le encanta acoger al que viene de afuera. Por cierto, hay un hotel cerrado, esperando a ser reabierto… ¿alguien se anima?

2 comentarios:

  1. Por Cudillero he estado, pero este destino puede ser una disculpa para volver a la zona. Me has convencido. Saludos

    ResponderEliminar
  2. Te esperamos!! Me alegro mucho de que esta lectura te haya animado. Aquí estamos, hasta pronto! Un abrazo.

    ResponderEliminar